top of page

Saladosur

Jorge Aulicino - 3 de Revolución Divino Tesoro

  • Foto del escritor: Salado Sur Editorial
    Salado Sur Editorial
  • 8 ago
  • 1 Min. de lectura

1848

(o Un filósofo en el mundo del satori)


Marx navegaba por el mar de las ideologías

y comprendió de pronto que

ideología quiere decir mentira


—y dejen de joder con “visión del mundo”, profirió

en perfecto alemán

—es decir dijo Weltanschauung.

Su visión del mundo se ensanchó y vio la orilla lejana.

Pero se tardaría mucho en comprender que al desembarcar

se mojó los zapatos y las botamangas.

--------------------------------------------------------


Circus


a Leónidas Lamborghini


Como el que cree

que existe en

algún idioma

una sola palabra

para

“la luz rosada

del amanecer”

y se pone a estudiar

un idioma oriental

y descubre el encanto

de otras palabras

como naves en el mar

y su escuela

es asaltada

por piratas malayos.





Apología de la cotidianeidad


Arboles resistiendo el invierno

cada vez más estúpido, más trivial

con los mismos cafés y las mismas pizzerías

y un aire apenas más gris que en verano.

Ya no hay juego de estaciones para los poetas

y los ciclistas matutinos,

las mismas hojas quebradizas, los mismos papeles

aparecerán bajo el auto abandonado frente a la plaza

y las campanas tendrán el mismo sonido que mal evoca

la campiña en el atardecer de cualquier ciudad;

serán

los mismos contenedores de basura

o quizá ésos sean los únicos que cambien;

la misma competencia de guarangadas y prepotencias

entre políticos de derecha, y de izquierda

porque eso quiere “la gente”,

sangre

sangre imaginaria

sangre patriarcal

policial

una forma de venganza

contra aquello que los hizo peores,

menores, subalternos

sonando a lata, no a sonata:

sus hijos disfrazados de ladrones

o traficantes

en 4x4

las capuchas de sus canguros levantadas

y altas zapatillas de marca.

 
 
 

Comentarios


bottom of page