En un cine porno, unos jubilados cascados
contemplaban, escépticos
Los retozos de un mal filmados de dos horas lascivas parejas;
No había argumento.
He ahí, pensaba yo, el rostro del amor
El auténtico rostro.
Algunos son seductores y seducirán siempre.
Y el resto sobrevive.
No existe ni el destino ni la fidelidad,
solo cuerpos que se atraen.
Sin sentir ningún apego ni, desde luego, piedad.
Uno juega y después destroza.
Algunos son seductores y por lo tanto muy amados;
Sabrán lo que es un orgasmo.
Pero hay tantos otros cansados y sin ganas que ocultar,
ni siquiera un fantasma;
Si acaso, una soledad es agravada por impúdica
alegria de las mujeres;
si acaso, una certeza: <<eso no es para mi>>
un oscuro y pequeño drama.
Con certeza morirán un poco desengañados,
sin ilusiones poéticas;
practicaran a conciencia el arte de despreciarse;
Será algo mecánico
Me dirijo a todo aquel que nunca haya sido amado
que nunca supo gustar
Me dirijo a los ausentes de sexo liberado
y del placer corriente.
No temáis, amigos, vuestra perdida es mínima
El amor no existe en ninguna parte.
Solo es una broma cruel de la que vosotros sois victimas
una jugada de experto.
Comments